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Arquitectos: Met Architektur
- Área: 348 m²
- Año: 2012
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Fotografías:Ulrich Stockhaus
El Castillo Mirabel, situado en el punto más alto del centro histórico de Olgiasca, en la península de Piona, y cuyos cimientos datan del siglo 13, fue adquirido y convertido en 1975 por el propietario del momento. Fue vendido al nuevo propietario en 2008.
El impulso para el proyecto actual era la intención de dividir el edificio, concebido como una sola unidad, en dos residencias completamente separadas. Cada residencia recibió una entrada independiente y su propia terraza. En el sureste, la esquina topográficamente mas baja, se creó un nuevo acceso desde la estrecha calle a la terraza del este.
La oferta se complementa con una unidad intercambiable en la esquina noroeste del edificio con su propio acceso directo, haciendo una tercera unidad. Esta consiste en un dormitorio y un baño que se pueden conectar a cualquiera de las otras residencias, o que pueden ser utilizados para unir las dos residencias. Las habitaciones de la planta baja y la terraza del este están a disposición de toda la casa y pueden, si es necesario, incluso funcionar como una cuarta unidad. Este concepto espacial permite al edificio ser utilizado en una amplia variedad de configuraciones flexibles.
La instalación de baños y cocinas generosos ha traído las mínimas instalaciones sanitarias antiguas a una consonancia con las exigencias modernas para cuartos húmedos. Las habitaciones existentes fueron modificadas de acuerdo a planos precisos para poder interconectarlas y crear líneas de visión en todo el edificio y en cada punto cardinal. La eliminación de la buhardilla obsoleta en el nivel superior abre la altura completa del espacio de techo como parte del espacio interno.
Antes de la conversión el edificio tenía un carácter muy introvertido y cerrado. Las habitaciones eran bastante oscuras y, con la excepción de la habitación de la torre, no había absolutamente ninguna conexión entre el interior y la impresionante vista hacia el sur. La relación entre los espacios interiores y exteriores se fortaleció mediante diversas medidas. En el lado sur, frente a la vista, se abrieron nuevas ventanas y las existentes se ampliaron y se convirtieron en puertas francesas, dando a cada nivel una vista sobre el lago. Las nuevas escaleras de entrada también mejoraron la accesibilidad a la vivienda desde las calles del pueblo.
Un enfoque adicional de la conversión es la renovación estructural del extenso daño por la humedad. Las principales medidas de renovación fueron la instalación de un sistema de calefacción, estuco aislante, la sustitución de todas las ventanas, una nueva impermeabilización, aislamiento térmico y revestimiento del techo, nuevo drenaje del techo, el drenaje a lo largo de las fachadas de la planta baja y la instalación de un suelo técnico para todos los componentes en contacto con el suelo. La mampostería de piedra natural existente se limpió en el exterior y las juntas dañadas fueron reparadas.
Gran atención se dedicó a la elaboración de los detalles para la evacuación de aguas pluviales y la conexión - estructuralmente sólida y estanca - entre las ventanas y la mampostería. Estos detalles se diseñaron de tal manera de preservar las características arquitectónicas significativas del edificio. Para el techo y la cubierta del tejado, por ejemplo, los canalones se integraron en la superficie del techo de manera que sean invisibles desde la calle de abajo. Además, los bordes de yeso de las ventanas, la tira de yeso bajo el alero del techo y las persianas de un solo lado se utilizaron para hacer el edificio parece más noble y más individual que antes de la renovación. Esto ha refinado la declaración arquitectónica del edificio y ha reforzado su importancia como punto central y definitorio de la estructura de la aldea.